El caso Pere Milla recuerda al de Iban Zubiaurre. El exfutbolista vasco hizo oídos sordos al año de contrato que tenía firmado con la Real Sociedad y se fue al Athletic Club, con el que firmó seis años sin negociar ni pagar traspaso. Pese a que reconoce que este problema "es distinto porque se discute una interpretación de una cláusula" recomienda al delantero catalán que llegue a un acuerdo porque "es mejor eso que un proceso judicial porque en casos como este, el perjudicado siempre es el jugador".
La sentencia le obligó a pagar cinco millones de euros, siendo el Athletic Club el responsable subsidiario. Ambas partes compartieron el pago (2,5 millones de euros cada uno) y Zubiaurre estuvo casi tres años sin jugar ni entrenarse, lo que truncó su prometedora carrera deportiva, que con 20 años le llevaba a ser jugador internacional y un prometedor lateral derecho. Tiempo después, el agente fue condenado a indemnizar al futbolista con 2,8 millones de euros por un mal desarrollo de su trabajo. En este caso, Zubi no fue el que denunció sino que se defendió de la reclamación del agente, que le reclamaba la comisión de su traspaso al Athletic Club.
"Es mejor que llegue a un acuerdo que atenerse a un proceso judicial que se puede alargar mucho en el tiempo. Fue muy duro porque tenía 20 o 21 años y me pasé casi tres sin jugar, en un momento clave de mi carrera sin poder entrenarme ni poder jugar. Espero que Pere Milla, después de su gran temporada, llegue a un entendimiento y evite males mayores. Al final creo que tuve suerte, dentro de lo malo, y fue una buena sentencia. Uno de los tres magistrados del Tribunal Supremo pedía que pagara los 30 millones y hay mucha diferencia entre eso y cinco millones", ha recordado en Onda Cero.