Este miércoles se ha celebrado en Aspe el acto simbólico del corte del primer racimo de uva de mesa embolsada del Vinalopó de este año. En él han participado, entre otros, el presidente de la Generalitat Carlos Mazón; el presidente de la Diputación de Alicante, Tony Pérez, y el director general de Desarrollo Rural de la conselleria de Agricultura.
Tras una pasada campaña marcada por el grave aumento de costes de producción, estancamiento de la demanda y consecuente caída de rentabilidad, la temporada de recolección de 2023 ha comenzado con previsiones también complicadas en términos tanto de producción como de comercialización.
Desde el Consejo Regular de la DOP Uva de Mesa Embolsada del Vinalopó se ha señalado que todo apunta a que la situación vivida el pasado año pueda repetir, al tiempo que a ello hay que añadir dificultades en la producción como consecuencia del calor y a la alta incidencia de plagas y enfermedades existente en la presente campaña.
La producción de uva de mesa embolsada en la presente campaña va a registrar una ligera caída de producción inscrita en la Denominación de Origen Protegida, que se estima que va a rondar los 35 millones de kilos, lo que represente en torno a 10 % menos respecto a la inscrita al cierre de 2022.
La producción acogida a la Denominación de Origen Protegida se extiende por los términos municipales de Aspe, Novelda, Hondón de las Nieves, Hondón de los Frailes, Monforte del Cid, Agost y La Romana.
Hasta hasta siete variedades de uva amparadas por la Denominación de Origen y su recolección va desde finales del mes de agosto has finales de año.
En el conjunto de la campaña, la producción y comercialización de la Uva del Vinalopó con DOP genera entre 10.000 y 13.000 puestos de trabajo directo.
