La vacuna sigue siendo la gran esperanza para vencer a la covid-19 a través de la inmunización masiva de la población.
La primera dosis de la de Pfizer ha llegado este jueves al centro de la tercera edad de Altabix donde se ha inoculado a los residentes que han dado negativo en los test PCR y a los que, con la infección superada tras contraer el virus y pasar el periodo de aislamiento, presentan una carga viral muy baja.
Los residentes y trabajadores que se encuentran en situación de positivos por coronavirus no han sido vacunados.
Tras muchas semanas en una situación angustiosa por el brote de coronavirus que ha sufrido, la situación ha mejorado y en estos momentos hay 21 residentes y 36 trabajadores diagnosticados de covid-19. Además, se han registrado en la residencia nueve fallecimientos por el virus.
Desde la Asociación por los Derechos y el Bienestar de los Ancianos en Residencias (Adbar), se ha valorado positivamente el refuerzo de los servicios de asistencia que ha realizado la Conselleria d Sanidad con la incorporación de dos médicas, tres enfermeros y 15 auxiliares de enfermería en horario de mañana, así como la contratación de un fisioterapeuta y un administrativo.
Pese a la situación esperanzadora que se vive en el centro con la reducción de los casos positivos que se ha registrado, desde el colectivo se han criticado graves déficits por parte de la empresa que gestiona por concesión administrativa la residencia de titularidad pública. En este sentido, se han denunciado “traslados al hospital” de residentes “que se han producido en condiciones tan graves que yo no se ha podido hacer nada por ellos”, así como que hay personas mayores que han llegado al hospital “desnutridos, deshidratados y con infección de orina”. También se ha lamentado que hay residentes que algunos días “se han quedado sin comer por falta de ayuda de algunas auxiliares para motivarles ante la tristeza e inapetencia en la que están inmersos”.
La falta de mantenimiento adecuado del centro, con timbres de llamada de las habitaciones que no funcionan o radiadores estropeados; la falta de información a los familiares; y la “desorganización” y “falta de supervisión” son otros de los aspectos que ha denunciado la Asociación por los Derechos y el Bienestar de los Ancianos en Residencias.