La playa ilicitana de Los Arenales del Sol ha sido testigo de un fenómeno meteorológico extraordinario durante la mañana de este lunes, con la presencia de una intensa tormenta de polvo subsahariano que ha marcado el cierre del fin de semana largo de San Vicente Ferrer. Desde el pasado viernes, la ciudad anticipaba condiciones atmosféricas inusuales, marcadas por el paso de nubes altas y una significativa calima, que ha culminado con el polvo depositado en abundancia sobre la superficie, afectando negativamente la calidad del aire.
Con temperaturas mínimas en ascenso, especialmente notables durante la madrugada del domingo, Elche, junto a localidades cercanas como Crevillent y Santa Pola, ha experimentado máximas en torno a los 22 y 26 grados centígrados respectivamente, durante el fin de semana. Este aumento térmico, acompañado de un cielo que varió de casi despejado a ligeramente nublado, ha creado las condiciones perfectas para que la calima, iniciada el viernes, que se ha intensificado con la llegada de polvo sahariano a la región.
La jornada de este lunes no solo ha seguido la tendencia de temperaturas máximas elevadas, sino que también ha presentado cambios atmosféricos significativos hacia el final del día. Un viento de noroeste, soplando con fuerza en momentos puntuales, ha marcado el inicio de la disipación de la calima. La nubosidad predominante, y la posibilidad de lluvias débiles y esporádicas hacia la tarde o noche, anticipan una mejora en la calidad del aire para los días siguientes.
A partir del martes se espera que el polvo sahariano en suspensión desaparezca, dando paso a cielos limpios y soleados, y a un descenso claro en las temperaturas, que prometen jornadas más frescas y agradables. Este episodio de calima, aunque temporal, ha dejado una huella visible en la ciudad, especialmente en las playas donde ha habido muchos ilicitanos que han aprovechado el día festivo para disfrutar de su 'mona', de las amistades y de la familia.
