Manu Morlanes no jugará en el Elche. El club franjiverde y el Villarreal no han encontrado un punto de entendimiento en la negociación para cerrar el traspaso del joven jugador zaragozano. Los ilicitanos pretendían contar con opciones de quedarse al futbolista en propiedad, con una cesión que incluyese una opción de compra a final de temporada, pero las aspiraciones del conjunto amarillo son diferentes.
El Villarreal quiere que Manu Morlanes se foguee en Primera División para regresar hecho la próxima temporada, después de su gran curso en Segunda en las filas del Almería. Para ello, además de asumir su ficha, también se contemplaba una serie de cláusulas que garantizasen que iba a jugar un mínimo de encuentros. De lo contrario, el Elche debería asumir el pago de una serie de cantidades.
Morlanes era uno de los jugadores que más gustaba a Fran Escribá para aportar competencia al centro del campo del Elche, donde ahora mismo sólo se encuentran Iván Marcone y Raúl Guti. El futbolista, de 22 años, había trasladado a su representante y al Elche su intención de vestir de franjiverde, pero el acuerdo no se ha concretado. Morlanes guarda un gran recuerdo de su paso como rival por el estadio Martínez Valero, donde vivió la final por el ascenso a Segunda División hace cuatro temporadas.
El club maneja otras opciones para reforzar la línea medular. Entre ellas se encuentra la de Jaime Seoane, del Huesca. Le queda un año de contrato y el canterano del Real Madrid quiere seguir jugando en Primera. Con esta situación, es difícil que acepte ampliar su contrato (como ocurrió en el Elche en su día con los casos de futbolistas como Iván Sánchez o Neyder Lozano). Y para el ataque también han sonado muchos nombres y el club, además de dos centrocampistas, uno ofensivo y otro defensivo, aspira a dos atacantes más.