La San Silvestre de Villena ha ampliado su recorrido desde los 5.660 metros de ediciones anteriores hasta los 6.300 metros, todos ellos por el entramado histórico de la ciudad, accesible para todos los públicos y niveles. La concejala de Deportes, Maite Gandía, ha animado a los aficionados a las carreras populares a participar en la XVI edición.
La recaudación se destinará a sufragar los costes de la escuela base del Club Atletismo Promesas de Villena, que tiene que realizar desplazamientos hasta la pista de atletismo de Elda para sus entrenamientos semanales.
Gandía considera que la colaboración del Club de Atletismo es "esencial para poder realizar esta prueba, entidad que aporta el diseño de los recorridos, los voluntarios de control para la prueba popular y el resto de elementos de control e inscripciones". La concejala de Deportes también ha agradecido a la Asociación de Vecinos El Rabal, que vuelve a ofrecer la tradicional merienda a los participantes, tras dos años condicionados por la situación de pandemia.
El fundador de la prueba y ganador de la misma en repetidas ocasiones, Andrés Micó, ha situado la cifra de participación en unos 600 participantes en la carrera popular y ha destacado la calidad y espectacularidad del recorrido que pasa por espacios de incalculable valor patrimonial como el Castillo La Atalaya, la Plaza de Santiago y la Iglesia de Santa María.
Por su parte, el presidente del Club Atletismo, Gaspar Sánchez, ha recordado que en la actualidad hay ya casi 300 inscripciones y confía en llegar a la cifra de 600 a pesar de que este año la prueba se realiza en viernes y no durante el fin de semana como en el pasado año.
Esta fiesta del deporte comenzará a las 18.00 horas con la realización de diferentes pruebas para las categorías infantiles, que contarán con trazados y recorridos por el centro de la ciudad adaptados a cada edad.
