La Vila aprueba un proyecto largamente acariciado: el de crear una rotonda que regule mejor el tráfico en la confluencia de la Avenida del País Valencià con las calles paralelas de Pizarro y Ciutat de València
Las obras cuentan con un presupuesto total de 403.000 euros con impuestos incluidos y, una vez licitadas, tendrán un plazo de ejecución de 17 semanas para su finalización.
Con la aprobación de este contrato, se pretende la mejora del entorno y la renovación urbana del vial estructural del Plan General de Ordenación Urbana con el fin de dotar a la zona de una nueva estética más coherente y en función de la zona donde se ubica. Se ejecutará, de esta manera, una glorieta ovalada que estará formada por un pavimento adoquinado para distinguirse visualmente de la calzada y estará delimitada con unos pilones escamoteables iluminados con una corona de bombillas tipo LED, de forma que se impida a ella el paso de vehículos y sea visible, en todo momento, el perímetro de la misma. "El objetivo principal de la actuación es conseguir una correcta fluidez a la circulación aumentando a su vez la seguridad vial de la intersección" según ha manifestado Andreu Verdú, alcalde de la ciudad.
Las obras vienen acompañadas de algunas mejoras y se incluyen un paso de peatones en el Nº1 de la avenida del País Valencià y la repavimentación de la calzada entre el paso de peatones de la Plaza de la Generalitat y el nuevo, así como la de la calle Joan Tonda Aragonés por un valor global e 45.000 euros más.
