La Audiencia Provincial de Alicante condena a una mujer que insultó a una compañera de trabajo llamándola “bollera de mierda” cuando ambas trabajaban en un comercio de la localidad de Finestrat.
Se trata de una mujer de 44 años que trabajaba en una mediana superficie dedicada a la distribución de artículos deportivos de ese municipio.
Estas descalificaciones y el trato vejatorio que la sentencia considera probados, se dieron, al menos, en dos ocasiones, en junio y diciembre de 2022. La Audiencia Provincial considera probado que la intención de la encausada fue “menoscabar su dignidad como persona, menospreciándola por su condición sexual” y que la "atacó verbalmente en sendas ocasiones".
Por estos hechos, la sentencia la considera responsable de un delito contra la integridad moral de las personas.
Acuerdo para indemnizar
La procesada admitió la acusación de la Fiscalía y reconoció la autoría de los insultos, alcanzando un acuerdo de conformidad, por el que pagará 1.000 euros a la víctima para resarcir el daño moral.
