Llorca ha indicado que “una parte importante de los vecinos y vecinas que asisten con regularidad al cementerio son personas de edad avanzada en ocasiones con problemas de movilidad y la presencia de escaleras dificulta el poder desplazarse de forma autónoma por el cementerio. Además, “al tratarse del cementerio más antiguo necesita de reparaciones y mantenimiento constante”.
Por eso, en los últimos años “se han llevado a cabo varias actuaciones que han suprimido bordillos y creado rampas. Siguiendo esa misma línea, con esta última inversión “se han creado, entre otras mejoras, dos nuevas rampas, dotando de total accesibilidad todas las zonas del recinto”.
Además de las nuevas rampas, también se ha procedido al rejuntado del pavimento de piedra en los puntos en los que estaba deteriorado, evitando así el riesgo de tropiezos.
Llorca ha señalado que “en estos momentos se está trabajando en los muros perimetrales del camposanto” y, más concretamente, en el muro derecho de la parte alta, donde era difícil actuar al encontrarse muy próximos los panteones. También se ha mejorado la estética del cementerio cerrando con losas de hormigón las tumbas que estaban abandonadas.