Suma y sigue. El abandono, la suciedad y la mala imagen de la estación de autobuses de Benidorm parece un cuento sin final. Así lo ha denunciado hoy el partido Socialista, tras una visita de los concejales al lugar. Cuatro meses después de la adjudicación definitiva de la gestión a una empresa de Enrique Ortiz, nada ha cambiado con esta infraestructura que recibe a miles de visitantes cada año.
Sergi castillo, portavoz adjunto del PSOE local, ha sido contundente: "Este empresario, corrupto confeso, consiguió el contrato que quería gracias al PP, pero la situación es de absoluto abandono. Si hace cuatro meses culminó su burla a la ciudad, ahora además chulea a Benidorm con el permiso del Gobierno del PP y mantiene la estación en un estado tercermundista”.
Así las cosas exigen explicaciones a quienes dicen, dieron la cara por este empresario”, dado que “En el pleno de julio se les dijo que se vigilaría el cumplimiento de las condiciones de esta infraestructura municipal, y no se está haciendo.
La oposición ha recordado que Ortiz gestionará el complejo hasta 2063, tras un periplo iniciado cuando se le encargó hacer un parking, 500 metros cuadrados para cafetería y oficinas, y un pequeño hostal de 6 habitaciones, "pero como no le resultaba rentable, decidió hacer otra cosa, lo que le dio la gana... sin proyecto, sin permisos y con mucha cara dura”.