La comarca tendrá que adquirir agua de aportes externos si no llueve esta primavera.
Es la conclusión a la que ha llegado la Junta General del Consorcio de Aguas de la Marina Baixa en la reunión de esta mañana en Benidorm, que ha estado presidida por Toni Pérez.
La Junta ha aprobado con un solo voto en contra el Plan de Emergencia en situación de sequía para la Marina Baixa que contempla tres escenarios diferentes que van desde la ausencia total e agua a la llegada de precipitaciones en primavera, pasando por un escenario intermedio.
Tres escenarios
En el peor de ellos, el plan prevé que habría que adquirir entre 3 y 5 Hm cúbicos adicionales, mientras que el escenario intermedio, con las lluvias habituales, no habría que recurrir a aportes extraordinarios.
El informe destaca también la necesidad de continuar mejorando el almacenamiento de agua ya que cada Hm3 procedente de la EDAR de Mutxamel supone un millón de euros de coste. Apuntaba también la Junta la necesidad de renovar las infraestructuras y optimizar los sistemas de riego en la comarca porque esa inversión continuada es la que ha permitido mantener el consumo a pesar del incremento de la población.
Así, en el año 2000 con una población de 120.000 personas, el consumo de agua en la Marina Baixa era de 19,92 hectómetros cúbicos. En 2019 la población creció hasta las 170.000 personas y, sin embargo, el consumo se mantuvo en 19,74 Hm3.