Vecinos de la huerta benidormense han comenzado a recibir notificaciones de la Consellería informando que, tras detectar esta peligros bacteria, deben arrancar y destruir sus olivos y almendros.
El consell advierte que de incumplir la medida podrían incurrir en una infracción grave que conllevaría cuantiosas multas.
Desde la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores, ASAJA, critican que la Generalitat lleve cinco años abordando la plaga de esta manera tan "radical" y piden otras fórmulas contempladas en el marco agrario europeo.
El secretario técnico de ASAJA, Ramón Espinosa, explica a Onda Cero Marina Baixa qué medidas alternativas se pueden dar y cómo deberían de proceder a la reforestación en el mismo momento en que se extraen los árboles.