Así lo ha indicado en Orihuela (Alicante), donde Puig ha visitado la nueva sede de la Confederación Hidrográfica del Segura. Desde el viernes pasado a las 12.00 horas está prohibida la entrada y salida de la Comunitat Valenciana, excepto por motivos justificados. El cierre perimetral se decretó por el plazo de siete días naturales y ahora se ampliará a otra semana más.
"Con total franqueza y normalidad, la idea es que se permanezca en esta situación como mínimo una semana más porque es una medida que no afecta excesivamente a la economía", ha indicado Puig, al igual que tampoco tiene "un efecto importante añadido" para la economía la restricción a la movilidad nocturna acordada en la autonomía, entre las 0.00 y las 6.00 horas, según ha subrayado.
"Esta medida de restricción nocturna la tenemos prevista hasta el 9 de diciembre y en esta primera etapa lo que está claro es que solo podemos apelar a mayor corresponsabilidad y al cumplimiento de las normas que dictan las autoridades sanitarias", ha manifestado el jefe del Consell.
Al cierre perimetral de la Comunitat se suma el toque de queda nocturno entre la medianoche y las seis de la mañana y la prohibición de reuniones de más de seis personas. Esas medidas estarán en vigor, al menos, hasta el 9 de diciembre. En todo caso, el President advierte ya que estas Navidades van a ser diferentes. Declaraciones en Telecinco.
Y en relación al confinamiento domiciliario, Puig ha pedido no tomar medidas con carácter convulsivo.
El gobierno valenciano sigue reticente a aplicar en la Comunitat un confinamiento domiciliario de la población, pese a que la epidemia de coronavirus está provocando una presión asistencial en hospitales que se acerca a la de los meses de marzo y abril. El ejecutivo valenciano apuesta por adoptar medidas intermedias entre el confinamiento y las que están actualmente en vigor. Esas medidas más duras pasarían por adelantar la hora del toque de queda o reducir aforos en hostelería. Lo ha explicado en Onda Cero la número dos de la Consellería de Sanitat, Isaura Navarro.
La Secretaria Autonómica reconcoe que la situación sigue empeorando en la Comuntiat, Pero también confía en que esa tendencia cambie en los próximos días cuando empiecen a tener efecto las medidas de la semana pasada, es decir, el cierre perimetral de la Comuntiat y el toque de queda nocturno. Hay que esperar 14 días, dice Navarro, antes de adoptar nuevas medidas.
Sobre el sector de la hostelería, la número dos de la consellería de Sanitat asegura que, si se cumplieran las medidas que ya son obligatorias, habría menos contagios en ese sector. El problema, dice, no son las empresas, sino que los clientes no cumplen las medidas y no puede haber un policía en cada bar.
La mayoría de brotes que se producen en la Comunitat son de origen social y familiar. También han incrementado en las últimas semanas los contagios en ámbito laboral.