Son cifras que forman parte de la Cuenta General de la Administración de 2020 aprobada este lunes por el pleno del Consell.
La llegada de esos fondos extraordinarios ha permitido que los resultados negativos de las cuentas se reduzcan en 700 millones de euros. Todo, según el conseller de Hacienda, Vicent Soler, a pesar de la infrafinanciación que sufre la Comunitat Valenciana. Una reivindicación para la que, ha dicho, el Consell "no se cierra a nada".
Ha asegurado también Soler que, de no consolidarse esos fondos, "en 2023 habrá problemas y la Generalitat Valenciana volvería al déficit estructural que registraba antes de la pandemia".
El conseller de Hacienda ha asegurado también que la estrategia de la Generalitat, para lograr ese cambio en el sistema de financiación, pasa por abandonar el partidismo, de ahí las reuniones que mantendrá el president, Ximo Puig, con otros líderes autonómicos como el de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla.
