El responsable en los bomberos de València de este sindicato, Carlos Conde, ha explicado que la plantilla del cuerpo era de casi seiscientos efectivos en 2004, y que ahora apenas supera los trescientos. En 2009 ya salieron a la calle porque consideraban insuficientes los 62 bomberos asignados a cada turno de guardia. Hoy la falta de personal ha llevado a rebajar ese número hasta sólo 42 bomberos.
El responsable sindical afirma además que con esta situación sería imposible atender adecuadamente una gran catástrofe como la del accidente del metro de 2006, que la "capacidad de respuesta" ante cualquier emergencia cotidiana ha aumentado considerablemente.
El Sindicato Profesional de Policía Locales y Bomberos denuncia además que el Ayuntamiento debe a los bomberos de València catorce mil horas de libre disposición, que no han podido disfrutar estos últimos años debido a esa falta de plantilla. En la concentración de este jueves en la plaza del Ayuntamiento pedirán el cese del concejal de protección ciudadana, Aarón Cano que, según afirman, se ha negado a reunirse con el sindicato para abordar todos estos problemas.