Según ha podido saber Onda Cero, este rocambolesco caso se produjo hace varias semanas. La embarazada se puso de parto y presentó en el Hospital La Fe de València junto a un acompañante y un abogado para defender su derecho a no llevar mascarilla dentro del centro sanitario. Además, tampoco aceptaron realizarse una PCR ni ninguna otra prueba para saber si podían estar contagiados de coronavirus.
La actitud de la pareja género momentos de tensión con el personal del hospital, que finalmente y tras consultar con la Conselleria de Sanidad decidió aislarles en una habitación para infecciosos. Médicos, enfermeras y demás personal tuvo también que colocarse equipos EPI de protección, así como guantes y pantalla de protección facial para asistir a la mujer tanto en el parto como durante los días que estuvo en el centro hasta ser dada de alta.
A pesar de ello, además, la paciente acabó interponiendo una denuncia contra el hospital por trato degradante. Asegura que tanto ella como su acompañante se sintieron maltratados y señalados durante su estancia en el centro.
Desde la Conselleria de Sanidad han explicado a Onda Cero que en estos casos no se puede forzar a los “negacionistas” a ponerse la mascarilla dentro del hospital, porque debe primar la atención sanitaria por encima de esa obligación. El protocolo establece que estos pacientes deben ser tratados como cualquier caso sospechoso de estar contagiado de Covid, aislados en un una habitación y atendidos en todo momento con equipos EPI. Reconocen desde el departamento que dirige Ana Barceló que es el primer caso de este tipo del que han tenido conocimiento hasta ahora en la Comunitat Valenciana.
