La empresa ha bautizado como “paradas violeta” este servicio, que ofrecerá en todas sus líneas nocturnas y también durante el horario nocturno de la 89 y la 90. Otras ciudades como Bilbao o Castellò ya disponen de este tipo de paradas a demanda, que pretenden evitar que las mujeres que viajan solas o en grupos reducidos por las noches se expongan a situaciones de riesgo. De esta manera, como ha explicado el presidente de la EMT, el concejal Giuseppe Grezzi, podrán solicitarle al conductor bajar durante el trayecto en cualquier punto cercano a su destino. La salida del autobús deberá realizarse por las puertas delanteras "y en lugares donde no se ponga en riesgo la seguridad de los usuarios ni de la circulación, según ha señalado el edil.
Grezzi ha explicado que el 53 por ciento de las usuarias de las líneas nocturnas de la EMT son mujeres. Durante los primeros meses de funcionamiento de estas “paradas violeta”, la compañía comprobará si es necesario realizar algún ajuste en el servicio, como modificar horarios y frecuencias o ampliarlo a colectivos como personas LGTBI.
El servicio se pondrá en marcha el 23 de marzo, aprovechando la remodelación de líneas en el centro que la EMT realizará ese mismo día. Este próximo domingo 8 de marzo la empresa realizará una campaña informativa para dar a conocer la iniciativa durante los actos programados para conmemorar el Día de la Mujer.