El Ayuntamiento de València ha aprobado en la Junta Local de Gobierno las alegaciones que presentará al nuevo Plan Hidrológico del Júcar planteado por el Gobierno de España. Se trata de un plan cuatrienal que marcará la gestión de los recursos de la cuenca hidrográfica entre 2022 y 2026. El consistorio, como propietario del lago de la Albufera, quiere que ese documento acabe por fin con el histórico déficit de agua que sufre este espacio protegido. La principal reclamación del Ayuntamiento es que se garantice un aporte mínimo del Júcar al lago de 70 hectómetros cúbicos anuales, según ha explicado el concejal de Devesa-Albufera, Sergi Campillo:
Esta petición no aparece recogida expresamente en el plan, que únicamente refleja que todos los ahorros que se consigan con obras de modernización hidráulica en la cuenca irán a parar al lago. El nuevo plan del Júcar, en cambio, sí contiene otras importantes reivindicaciones del Ayuntamiento. Entre ellas, el Gobierno de España se compromete a pagar la reforma del colector Oeste de València y la construcción de una nueva depuradora que descongestione la de Pinedo. Son dos obras imprescindibles para evitar que haya vertidos de aguas fecales a las playas y a la Albufera cuando el sistema de saneamiento se colapsa durante los episodios de lluvias intensas.