Llegaba el Levante UD a su segundo partido consecutivo en el Ciutat de Valencia buscando su segunda victoria, de forma consecutiva para ver una pequeña luz al final del túnel, ante el penúltimo clasificado, el Cádiz de Sergio González que llevaba 8 partidos consecutivos sin conocer la victoria y ni aún así. Arrancó mejor el cuadro de Lisci, generando llegando, con un cabezazo de Roger muy claro que no encontró colocación y que atajó Ledesma, seguía llegando pero en el minuto 36 entrada del Choco por banda, centro Álvaro Negredo se alzaba para rematar cruzado de cabeza a la base del palo y marcando para los gaditanos.
La puntilla en la segunda parte
Así llegamos al descanso, con un jarro de agua fría en Orriols que aún creía en empatar y remontar, algo que tuvo Melero en sus botas en el primer lance del segundo acto pero su balón se fue alto. Seguía insistiendo la escuadra granota que daba entrada a Jorge De Frutos para seguir llegando pero cuando seguía intentándolo, el capitán de los andaluces, Salvi, ponía el 0-2 tras una internada por banda derecha. Gol y follón porque Alejo, como dijo Alessio Lisci en sala de prensa hizo un gesto despectivo a la grada, gesto que enfadó a Morales que se fue a por él, saltaron ambos banquillos, Lisci fue allí, acción que le costo la roja mientras que Alejo y Morales vieron la amarilla.
"Quico Vete Ya"
Desde ahí ya se jugó poco y con el paso de los minutos el resultado era una losa en la grada que entonó el "Quico Vete Ya". Una derrota que deja a los levantinistas muy lejos de los puestos de salvación que marca el Mallorca, concretamente a 9 puntos, situación altamente comprometida para un club y un equipo que no encuentra un rumbo claro