La Liga ha denunciado que un grupo de 200 aficionados entonaron cánticos con insultos contra el entrenador del Valencia CF José Bordalás en el partido disputado el pasado domingo ante Osasuna en El Sadar. Eso si, en ese mismo escrito remitido al Comité de Competición y a la Comisión Antiviolencia se destaca que no fueron secundados por el resto del estadio.
La denuncia de La Liga
El escrito remitido dice textualmente:
"La Liga Nacional de Fútbol Profesional remite cada semana un escrito de denuncia al Comité́ de Competición de la RFEF y a la Comisión Antiviolencia con aquellos cánticos que se producen en los encuentros de fútbol que inciten a la violencia o tengan un contenido insultante o intolerante. Estos cánticos aparecen recogidos como comportamientos prohibidos y por tanto sancionables, tanto en el Código de Disciplina Deportiva de la RFEF como en la Legislación contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
La Liga pone a disposición de los aficionados un buzón de correo electrónico que acudan a los partidos envíen sus denuncias, sugerencias o requerimientos con el fin de contribuir a la lucha contra la violencia en los estadios. La dirección es: viveelfutbol@laliga.es.
Tras la disputa de la jornada 4 de LaLiga Santander se ha procedido a la remisión a los organismos anteriores, de las siguientes denuncias:
1. Partido CLUB ATLÉTICO OSASUNA – VALENCIA CF, jornada 4 de LaLiga Santander en el estadio el Sadar de Pamplona.
- En el minuto 4 de partido, y durante el transcurso del juego, unos 200 aficionados locales, ubicados en sectores dispersos de la grada baja del Fondo Sur, entonaron de forma coral y coordinada, durante aproximadamente 10 segundos, el cántico: “¡Bordalás, hijo de puta!”, dirigido al entrenador del equipo visitante, sin ser secundado por el resto de los aficionados del estadio.
- En el minuto 28 de partido, y durante el transcurso del juego, unos 200 aficionados locales, ubicados en sectores dispersos de la grada baja del Fondo Sur, entonaron de forma coral y coordinada, durante aproximadamente 10 segundos, el cántico: “¡Bordalás, Bordalás, Bordalás, hijo de puta, Bordalás!”, dirigido al entrenador del equipo visitante, sin ser secundado por el resto de los aficionados del estadio.
Se ha de destacar que el resto de los aficionados locales presentes en el estadio han mantenido un comportamiento adecuado durante el partido, y que los hechos descritos únicamente han ocurrido en la zona citada anteriormente".