La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) ha detenido este jueves al subdelegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Rafael Rubio, junto al exvicealcalde de Valencia durante el Gobierno de la popular Rita Barberá, Alfonso Grau, en el mercado de la operación Azud, que investiga el cobro de comisiones a contratistas en el Ayuntamiento de la región.
A raíz de esta detención por una supuesta trama de cobro de comisiones a cambio de adjudicaciones, Rafael Rubio ha sido destituido como subdelegado del Gobierno en Valencia por la delegada gubernamental en Valencia, Gloria Calero. En un comunicado, Calero ha anunciado que "ante los últimos acontecimientos vinculados con Rafael Rubio, he decidido proceder a su cese inmediato".
Además de Alfonso Grau y Rafael Rubio, hay once detenidos más, entre los que destaca el empresario Jaime María Febrer, vinculado a algunas de las mayores operaciones urbanísticas de la ciudad.
El dinero percibido como mordida por Grau se sitúa en torno al millón de euros, mientras que Rubio habría recibido una cantidad inferior a los 500.000 euros.
La operación Azud investiga presuntos delitos de cohecho, falsedad documental, blanqueo de capitales y tráfico de influencias. En esta trama urbanística, en la que se investigan presuntas adjudicaciones de suelo público, el principal investigado es el cuñado de la exalcaldesa Barberá, José María Corbín, que fue detenido en abril de 2019. Los investigadores creen que el abogado controlaba el cobro de comisiones ilegales a contratistas del Ayuntamiento de Valencia entre 2005 y 2015. Junto a él, también figuran como investigados la mujer de este y hermana de la exalcaldesa, Asunción Barberá, y sus tres hijas.
Ante los últimos acontecimientos vinculados con el subdelegado del Gobierno de la Comunitat Valenciana, Rafael Rubio, la secretaria general del PSPV-PSOE de la provincia de València, Mercedes Caballero, ha anunciado que ha solicitado a la dirección federal del PSOE la apertura de expediente disciplinario y la suspensión de militancia.
