El entrenador del Levante UD se enfrenta al primer bache de la temporada, al enfrentarse al Castellón, equipo de moda de la categoría, con 5 bajas profesionales en una plantilla que sólo cuenta con 17 fichas del primer equipo.
Las bajas "siempre trastocan. Lo que sí que veo es una oportunidad para la gente que está jugando menos y que hemos visto que están preparados, es un momento de plantilla y de los chicos", ha explicado el entrenador.
La convocatoria cuenta con muchos jugadores del filial, de hecho, "es una ocasión para asomar la patita y ver qué pelaje tenemos. No queremos quejarnos, esta es la realidad del fútbol, es lógico que hayan lesiones. Se nos han acumulado en una zona en concreto, pero entiendo que entra en la normalidad de las temporadas", ha dicho Calero.
Pese a la derrota en Santander, el equipo sigue en la zona alta de la tabla. De hecho "lo que nos va a acercar a la victoria es ser uno mismo. Lo bueno que tenemos tiene que ir por delante. En las dos derrotas pudimos también ganar, hay que llevar el partido a donde nos conviene", ha reconocido el madrileño.
Morales "estaba fastidiado por tener ocasiones y fallarlas, pero peor hubiera sido no tenerlas. Fallarlas y tenerlas quiere decir que va a marcar. Le he transmitido la seguridad que tiene que tener un jugador, porque quiere sentirse importante y que las cosas le salgan bien, Cada día va a más", ha matizado Calero respecto a Morales.
El Castellón "nos puede llevar a situaciones límite que no conocemos, pero nosotros también. Trabajamos por ser un equipo vertical. Vamos a intentar que nuestras herramientas estén por delante de los nuestros. Son dos aficiones hermanas, con cariño entre ambas", ha concluido el técnico granota.