La Asociación Empresarial de Residencias y Servicios de Atención a la Dependencia de la Comunidad Valenciana (AERTE) reitera que la medida que reclama el Comité Económico y Social de la Comunitat es necesaria para evitar que se produzcan posiblesdesviaciones que deriven en insuficiencias asistenciales.
Desde el CES consideran que es positivo el cambio de perspectiva en la intervención de los centros pero plantea dudas muy importante en relación a la cobertura económica puesto que tal y como apunta José María Toro, presidente de AERTE, puede suponer un agravio para algunos usuarios però también para los propios centros.
Recuerda que sólo en coste de personal, una plaza residencial va a aumentar su coste en 580 euros mientras que la mejora de la prestación se establece en cerca de 300 euros mensuales, lo que supondrá que la diferencia sea abonada por las personas usuarias. En el caso de los centros de día según el presidente de AERTE la situación es más grave puesto que el sobrecoste estarà en torno a los 500 euros.
