Compromís ha puesto en marcha una campaña para mostrar su rechazo a la celebración de un simulacro de encierro taurino infantil por Ciutat Vella, tal y como aprobaron el pasado lunes en la Junta Municipal del distrito PP y Vox.
Se trata de carteles amarillos con un triángulo, que recuerda a una señal de peligro, y unos escolares dentro que están siendo embestidos por un toro. El texto, en la parte inferior, dice: “No a los encierros en Ciutat Vella: Contra la imposición de la cultura del maltrato y el peligro en València".
Según Papi Robles, portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de València, el gobierno está "imponiendo su ideología a niños y a niñas, una ideología fundamentada en el maltrato animal".
Con esta campaña quieren mostrar el rechazo a la iniciativa y ya han anunciado que la llevarán no solo ante el defensor del menor, sino también ante la ONU.
Robles ha señalado que la ciudad de València ha sido "reconocida por la defensa de los derechos de la infancia" y ha añadido que la alcaldesa María José Catalá está "atacando directamente" a los niños con esta acción. Para Compromís, este encierro es una "imposición de la ideología de la tortura del vicepresidente torero" y considera que pone en evidencia "la falta de palabra de Catalá y del Partido Popular, que primero aseguró que no votarían esta propuesta, pero que reculó y terminó votando lo que Vox quería".
Por su parte, Glòria Tello también ha mostrado su reprobación "ante este hito histórico" porque ha afirmado que la medida no cuenta con el apoyo ciudadano: "Los vecinos han mostrado su repulsa a esta actividad con dinero público las veces que se ha dotado en este debate en la Junta de Ciutat Vella".
