Compromís y el PSPV van a abandonar los gobiernos del Ayuntamiento de València y la Generalitat sin haber instalado ni una sola de las 25 pérgolas solares fotovoltaicas que se comprometieron a colocar en los patios de otros tantos colegios públicos de la ciudad. Un anuncio que realizaron “a bombo y platillo” hace ahora tres años y medio el alcalde -ahora en funciones- Joan Ribó y el entonces conseller de Educación, Vicent Marzà. Pero a día de hoy ni una sola de estas pérgolas se ha colocado. Ni siquiera ha comenzado la licitación de ninguna de ellas.
El acuerdo fue anunciado en enero de 2020 como ampliación del “Pla Edificant” de la Generalitat para la construcción y mejora de centros escolares. Un plan que, paradójicamente, pretendía agilizar la ejecución de este tipo de obras. Estas pérgolas debían cumplir un doble objetivo: proporcionar sombra a los patios escolares y ayudar a los centros a reducir su factura energética.
A la instalación de estas pérgolas fotovoltaicas se iban a destinar 4,2 millones de euros. Preguntada por Onda Cero sobre este retraso, desde la Conselleria de Educación explican que el Ayuntamiento no ha redactado la memoria técnica con la valoración económica de cada una de las pérgolas, un documento indispensable para seguir adelante con la tramitación. Por su parte, fuentes municipales aseguran que el Ayuntamiento ha preferido priorizar los aumentos de costes que la guerra en Ucrania y la pandemia han generado en otras obras más importantes del Pla Edificant, como el nuevo CEIP 106 de Malilla o el nuevo IES de Patraix.
Paralelamente, el consistorio sí está instalando este tipo de pérgolas con sus propios recursos en los centros docentes de titularidad municipal. Por ejemplo, ya están colocadas en el colegio Santiago Grisolía o en la “escoleta” de Pinedo, y está a punto de adjudicarse la del colegio municipal de Benimaclet.