En el fútbol nada pasa por casualidad. A mayor inversión más posibilidades de que el objetivo deportivo sea más ambicioso. Este sábado se enfrentan en La Cerámica el Villarreal y el Valencia en un derbi en el que los amarillos parten como claros favoritos. Y es que ambos equipos tienen objetivos totalmente diferenciados y muy distantes: el Villarreal pelea por entrar en Champions mientas que el Valencia lo hace por no descender.
Pese a que el Valencia tiene numerosos títulos e historia, más incluso que el propio Villarreal, hoy en día la balanza se decanta por los "groguets"cuyos gestores entienden perfectamente que a un equipo de fútbol hay que sacarle un rendimiento económico pero también deportivo y que para poder crecer hay que reinvertir parte de lo ingresado en ventas. Los números no engañan. Mientras en el Villarreal, en los últimos cinco años, se ha reinvertido en fichajes el 68% en el Valencia tan solo el 20%
En la temporada 2020/2021, la primera con Corona al frente de la dirección deportiva, el Valencia hizo ventas por valor de 88,5 millones de euros (Ferrán Torres, Rodrigo, Kondogbia, Coquelin, Parejo...) mientras que tan solo se gastó en el mercado de fichajes 500.000 euros Es la famosa campaña en la que se fichó a Ferro, Cutrone y Oliva en el mercado de invierno y no se trajo ningún futbolista en el de verano. En esa misma campaña el Villarreal vendió por 26,65 millones de euros y se gastó 37,84 millones.
En la 2021/2022los valencianistas vendieron por un total de 2,7 millones de euros con la salida de Wass (Kang-in Lee se marchó gratis) y se gastaron en compras 16,35 millones. Fue este año cuando llegó Marcos André por 8,5 millones de euros que hasta la fecha es el fichaje más caro de los últimos cinco años. Sus vecinos del Villarreal hicieron ventas por un valor de 10.34 millones y se gastaron 54,5 en reforzar la plantilla.
Para la temporada 2022/2023 con la venta de Gonzalo Guedes y de Carlos Soler principalmente los ingresos del Valencia fueron de 54,6 millones de eurosde los que tan solo 12,5 millones se destinaron a mejorar la plantilla. En el Villarreal las ventas fueron de 31,6 millones y los fichajes le costaron 6,48 millones.
Ya en la campaña 2023/2024 el Valencia obtuvo 28,6 millones de euros con la marcha de Yunus Musah al Milan junto a las de Koba, Racic, Marcos André y Jorge Sáenz pero tan solo destinó 10,4 millones a tratar de mejorar el equipo con las llegadas de Pepelu y Cenk por los que se pagaron 5 millones de euros cada uno. En ese mismo año el Villarreal vendió por 113 millones con las salidas de Nicolas Jackson, Pau Torres, Samuel Chukwueze y Boulaye Dia principalmente mientras que en el mercado el gasto ascendió a 12,5 millones de euros.
Y por último en esta temporada el Valencia ha tenido un ingreso de 30 millones de euros con la venta de Mamardashvili y solo se ha gastado 1,35 millones de euros con el fichaje de Luis Rioja mientras que sus vecinos han vendido por 74,5 millones reinvirtiendo un total de 63 millones para mejorar su plantilla.
En total el Valencia en estos últimos 5 años ha vendido por 204,75 millones y ha gastado 41,1 millones lo que supone un superávit de 163,65 millones de euros y que tan solo se haya reinvertido un 20% de lo ingresado en traspasos. Por contra el Villarreal, en estos 5 años, ha hecho ventas por un valor total de 256,09 millones y se ha gastado 174,32 millones con un balance positivo de 81,77 millones y con un 68% de reinversión en fichajes de lo ingresado.
Esta es la verdadera diferencia de gestión de ambos equipos que además de ve reflejada en la tabla clasificatoria y a la que habría que añadir el trabajo de la dirección deportiva en encontrar jugadores libres sin coste de traspaso, el último ejemplo es el de Cardona, y que no solo le están dando un buen rendimiento deportivo sino que además en un futuro le van a poder sacar también un rendimiento económico.