La inflación, que hace un año ocupaba el quinto lugar, ha pasado a ser el problema que más preocupa a los economistas valencianos frente a otros aspectos como el paro que ahora ha quedado relegado. Sobre como será su evolución según la mayoría se volverá en próximos meses a cifras del pasado verano aunque cerca de un tres por ciento cree que si se está produciendo una moderación.
Una inestabilidad que el presidente del Consejo de Colegios de Economistas de la Comunidad Valenciana, Juan José Enríquez, recuerda el 60 % de los encuestados señala se extenderá entre doce y veinticuatro meses.
Además reconocen que los salarios no se recuperarán a corto plazo y que esa pérdida de poder adquisitivo tendrá un impacto importante sobre el consumo y por tanto en la recuperación económica. Sin embargo apuntan deben subir menos que la inflación. También incrementa el número de encuestados que considera que la situación de la economía valenciana es peor que hace seis meses tal y como explica el Decano presidente del Ilustre Colegio Oficial de Economistas de Alicante, Francisco Menargues.
Recuerdan que no será positiva la subida de algunos impuestos en nuestro territorio el próximo año.
Con esta perspectiva de cara a 2023 las previsiones son que será un primer semestre del año complicado puesto que un 66 por ciento de los economistas cree que la situación económica actual está mal e irá a peor.