Desde la Asociación Valenciana de la Industria de la Automoción, AVIA, afirman que la decisión afianza la Comunitat Valenciana como la región europea referente en movilidad eléctrica y sostenible, así como en un polo de inversión tecnológico.
Reconoce Elena Lluch que será un respiro para muchas empresas del sector, después de los últimos años de incertidumbre que han vivido, puesto que la asignación a la planta valenciana supone su continuidad y futuro pero también de todo su entorno.