Cerca de diez mil trabajadores de unos tres cientos centros que atienden a personas mayores, con discapacidad o infancia, entre otros sectores, siguen pendientes de que la Consellería de Servicios Sociales, que dirige Susana Camarero, aplique la homologación salarial y la mejora del abono de módulos acordada con el gobierno del Botànic.
Recuerdan que las cuantías de los módulos que se siguen aplicando son antiguas lo que ha provocado que los centros estén asumiendo la subida de los costes para seguir prestando a los usuarios la atención que necesitan.
Como consecuencia según Salva Moya, responsable de organización de la Federación de Enseñanza de CCOO, algunos trabajadores hay meses que no cobran sus nóminas.
Afirma que por el momento no hay diálogo con la Consellería y no han recibido ninguna respuesta sobre el motivo por el que no se ha firmado ya el acuerdo que se alcanzó y que reconoce podía haber firmado el anterior gobierno.