Fabio Celestini jugó en el Levante UD una temporada antes de marcharse al Getafe. Hoy en día es el entrenador del Basilea al que tiene líder de su Liga. Su esposa es de Albal, una de las poblaciones afectadas por la Dana, y ha contado su experiencia tras haber aprovechado el parón por selecciones para viajar a Valencia y tratar de aportar su ayuda.
"Tenemos un local en Albal en la calle principal donde guardo toda mi ropa de futbolista. Cuando no entreno estoy mucho en Albal, es mi segunda residencia. Aquel día no pude hablar con mi familia hasta el día siguiente. Era como el apocalipsis. Nos dimos cuenta de la gravedad al día siguiente. Mi mujer no podía localizar a su familia", relataba Celestini. "Yo fui en el último parón por selecciones con mi mujer para ayudar con nuestra ignorancia. Cuando el taxi nos llevó por la Pista de Silla no nos lo creíamos. Nos sentíamos un poco inútiles y nos dedicamos más a apoyar a nuestras familias", aseguraba.
Tratamiento en los medios de comunicación mundiales
Una de las preocupaciones de Celestini es que el foco se apague y la gente olvide la gran cantidad de ayuda que aún se necesita. En Suiza "tuvimos las primeras semanas aquí en todos los informativos lo que pasaba, pero ahora ya no cuentan nada. Allí hay miles de personas que necesitan ayuda todavía y siguen con barro. Y los coches amontonados. Si lo haces en una película piensas que es una exageración", afirmaba.
También recordaba que "yo soy de una zona en la que hay muchos terremotos. Cuando hay se viene todo abajo y hay gente tres años después sin casas y viviendo en cabañas y eso ya parece que no sea un drama. No podemos dejar que pase lo mismo, no pueden olvidarse de ellos".
Su etapa en el Levante
Respecto a su etapa en el Levante comentaba que "no fue muy buena. Llegué con Schuster y en la primera parte de la temporada volábamos, incluso fuimos líderes, pero la segunda fue muy complicada y descendimos contra el Villarreal. Una pena. Pero el Levante tiene que estar en primera".