PROGRAMA IVF

El Gobierno valenciano moviliza medio millón de euros entre los primeros jóvenes adscritos al plan de avales para la compra de vivienda

Las primeras seis operaciones son en Ibi, Pobla de Farnals, Senyera, Cocentaina, La Vall d’Uixó y València

ondacero.es

València |

Archivo. Carlos Mazón, president de la Generalitat Valenciana.
Archivo. Carlos Mazón, president de la Generalitat Valenciana. | GVA

El 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, ha avanzado que ya se han aprobado las seis primeras operaciones del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) para avalar la compra de vivienda a jóvenes en la Comunitat Valenciana.

En este sentido, Mazón ha destacado que un mes después de la presentación de este programa, "ya hay jóvenes que van a poder dar ese gran paso que supone la compra de una primera residencia para iniciar su proyecto de vida".

En concreto, los primeros avales IVF van a facilitar el acceso a financiación por valor de casi 482.000 euros, a través de seis créditos hipotecarios suscritos con Caixabank y Caixa Rural La Vall San Isidro Coop. Esta financiación va a permitir la adquisición de seis viviendas en las localidades de Ibi, Pobla de Farnals, Senyera, Cocentaina, La Vall d’Uixó y València.

En este sentido, Mazón ha anunciado que a las 14 entidades financieras que suscribieron hace un mes el acuerdo de colaboración con el IVF para la puesta en marcha de este programa se ha sumado esta misma semana Caja Rural Central, con lo que pasan a ser 15 las entidades colaboradoras que ,a través de sus oficinas, informan a los jóvenes de la Comunitat de la posibilidad de solicitar un aval IVF, para acceder con mayor facilidad a la financiación necesaria para adquirir su primera vivienda.

El programa de garantías del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) facilita el acceso al crédito a jóvenes de 18 hasta 45 años para la adquisición de su primer inmueble. Este plan permite que el comprador obtenga un préstamo de hasta el 95% del precio de la vivienda, que no supere los 277.000 euros, lo que favorece salvar la barrera que supone disponer de una entrada por un mínimo del 20 % del inmueble.

Las viviendas pueden ser nuevas o usadas, de venta libre o de protección pública que se destinen a domicilio habitual.