El concejal de movilidad, Giuseppe Grezzi, ha vuelto a prorrogar la concesión para explotar una de las dos líneas de autobuses turísticos que operan en València a un empresario condenado en firme por corrupción. Se trata de Urbano Catalán, propietario del Grupo Transvía, condenado por sobornar con relojes de lujo durante la etapa de gobierno del PP al entonces vicealcalde, Alfonso Grau.
El actual gobierno local comenzó a introducir hace años en sus contrataciones públicas cláusulas anticorrupción, que entre otras cosas prohíben concurrir a los concursos a personas o empresas condenadas por este tipo de delitos. Sin embargo, y a pesar de que el propio Grezzi siempre se ha presentado como un adalid contra la corrupción, todo eso no ha impedido que le haya renovado la concesión a este empresario.
Caso Taula
Urbano Catalán fue condenado por la Audiencia de València por sobornar con relojes de lujo a Alfonso Grau cuando era vicealcalde de València, en el marco de una de las piezas del Caso Taula. El pasado mes de mayo el Tribunal Supremo confirmó el fallo que, por tanto, ya es firme.
A pesar de ello -como decimos- el Ayuntamiento le ha concedido una segunda prórroga de seis meses más para explotar el “Bus Turístic” (la actual, otorgada en septiembre, termina el próximo 1 de febrero). En este caso no se trata de un concurso público en que se hayan introducido cláusulas administrativas. Pero sí es una concesión administrativa que el gobierno local podía o no haber prorrogado. Es importante recordar que existen dos empresas que prestan este servicio en València, por lo que la no renovación del permiso a una de ellas no hubiera supuesto dejar a la ciudad sin autobuses turísticos.
Ocho años sin licitar
Mientras tanto, Grezzi sigue sin sacar a concurso la explotación de este servicio y acabará su segundo mandato sin hacerlo, a pesar de que lo anunció nada más acceder al consistorio en 2015. En su día el PP otorgó “a dedo” la explotación a las dos empresas que lo gestionan, algo que el concejal de Compromís calificó de “regalo”, pero que sin embargo ha mantenido.
En septiembre de 2019 Grezzi ya dijo que estaban prácticamente ultimados los pliegos de condiciones para convocar el concurso. Desde entonces la falta de personal ha sido la excusa que ha venido poniendo el edil para justificar el retraso. Algo que este viernes le ha echado en cara, a preguntas de Onda Cero, la vicealcaldesa socialista, Sandra Gómez:
Ahora, como decíamos, el actual Ayuntamiento ha concedió otra prórroga de seis meses -hasta el 1 agosto de 2023- a las empresas que gestionan los autobuses turísticos, mientras se sigue preparando el concurso.