Los tres partidos que dan apoyo al gobierno valenciano (PSPV, Compromís y Unides Podem) han mostrado este martes su "satisfacción" ante la reforma fiscal aprobada por el Consell, tras la Junta de Síndicas celebrada en Les Corts Valencianes.
La portavoz adjunta del PSPV-PSOE, Carmen Martínez, ha destacado el avance para "ayudas a las familias a llegar a fin de mes en este momento en el que la inflación está desbocada". "Esto es lo que pretende el gobierno de Ximo Puig con esta reforma fiscal", ha subrayado.
Por su parte, la síndica de Compromís, Papi Robles, ha destacado que lo prioritario "era aliviar a la gente que más necesita el apoyo de la administración" y ha defendido lo siguiente: "Quien más tiene más aporta con estas medidas".
Desde Unides Podem, la síndica, Pilar Lima ha insistido en que han obtenido "cosas positivas" con este acuerdo que, a su juicio, "alivia la carga fiscal para las familias humildes".
¿QUÉ DICE LA OPOSICIÓN?
La síndica del PP, María José Catalá, ha calificado la reforma fiscal del Botànic de "cosmética y raquítica" y ha afeado al president, Ximo Puig, "bajar los impuestos para subirlos luego de elecciones".
Desde Ciudadanos, la síndica, Ruth Merino ha calificado la medida de "pura demagogia" y cree que la subida de otros impuestos - en referencia a Patrimonio y Transmisiones Patrimoniales- es "insultante" por la "sobrerrecaudación" que tendrá la Generalitat este año por la inflación.