Hoy venía pensando… el mensaje de Baraja.
Inmersos en la llegada de Peter Federico no reparamos en exceso en que Baraja además de hablar del futbolista del Castilla en Movistar Plus también lanzó un mensaje a la propiedad. Y creo que no es casualidad que lo hiciera sabiendo que iba a perder a Paulista en este mercado invernal.
No es que sea nada nuevo. Marcelino habló del cangrejo, a Javi Gracia le traspason regalados a Parejo, Coquelin y Rodrigo Moreno y no le trajeron nada, Bordalás quedó tocado ante la propiedad tras chocar en la política de fichajes de invierno y Gattuso dio la espantada tal día como ayer de hace un año en vistas de que no iba a haber refuerzos. Pues ahora, le toca a Baraja.
Porque el Pipo sabe, como sabemos nosotros, que Lim no tiene ninguna intención de hacer crecer al Valencia. El Pipo sabe, como sabemos nosotros, que no existe ningún proyecto. Y el Pipo sabe, como sabemos nosotros, que pedirle ambición a Lim es predicar en el desierto. De ahí que ese mensaje que lanzó el pasado lunes por la tarde creo que es el principio de lo que se viene.
Lo he dicho en muchas ocasiones. Desde Marcelino, Baraja es lo mejor que le ha podido pasar al Valencia. Pero ni aún así está a salvo de las decisiones caprichosas del señor de Singapur. Quien piense que es intocable por lo que está haciendo o por como ha conectado con Mestalla o porque es una leyenda del valencianismo… que se acuerde que a Marcelino se lo cargó después de ganar la Copa y clasificar dos años seguidos al Valencia para Champions. Y no le tembló el pulso.
Hay quien dice que Baraja debería dimitir. ¿Estamos locos? No, por Dios. Baraja, afortunadamente, no es Gattuso y jamás abandonará el barco. A los que dicen eso ¿os imagináis el caos que supondría? ¿en serio deseáis eso al Valencia? El Pipo seguirá subido al barco mientras todos lo estemos… aunque el capitán sea un majadero…