Hoy venía pensando en… la petición a los políticos de no negociar con Meriton.
Vaya por delante que yo soy el primero al que no le gusta que haya que negociar nada con Meriton, de los que piensa que al enemigo ni agua y de los que desea que Peter Lim se vaya cuanto antes del Valencia. Su salida del club debería ser innegociable. Pero por desgracia hay ciertas cosas que sobrepasan al hecho de quien sea el dueño.
Porque puestos a pedir entonces… había que pedirle a Puma que no firmara ningún patrocinio con el Valencia o a cualquier empresa que lo tenga que lo retire o a los futbolistas que no ficharan por el Valencia mientras Peter Lim sea su dueño ¿no?
El Valencia necesita el Nuevo Mestalla tanto como la ciudad necesita que de una vez por todas se solucione un problema que lleva enquistado casi 15 años. Si alguien me asegurara que bloqueando la construcción del nuevo estadio, Peter Lim se marcharía yo sería el primero en enarbolar esa bandera. Pero al igual que no hay certeza de que acabando el estadio decida vender sus acciones, tampoco la hay si no se finaliza. Una prueba: durante los ocho años que lleva en el Valencia nunca ha tenido intención de acabarlo y no por ello ha abandonado el Valencia.
Lo que yo si pido a los polícos, en el caso de que se firme un nuevo convenio, es que se le exija cumplir con sus compromisos y se tenga la certeza, penalizaciones o lo que sea de por medio, de que los va cumplir. Los compromisos con el Valencia y con la ciudad. Y con la ciudad porque los políticos están para defender el bien de la ciudad y este pasa por acabar con esa imagen de la Avenida de Cortes Valencianas.
Hay quien dice que sería darle un balón de oxígeno. Yo soy de los que piensa que tener un nuevo estadio que permita generar más ingresos sería darle un balón de oxígeno pero… al Valencia. Porque Lim un día se irá y si se finaliza, ese estadio nuevo y moderno será patrimonio del Valencia y… de la ciudad de Valencia.