“Ahora mismo soy leyenda. Ya soy alguien”, ese ha sido el titular de Jaume Masiá, flamante Campeón del Mundo de Motociclismo en la categoría Moto 3, sumándose a nombres como el de Ricardo Tormo, Champi Herreros, Jorge Martínez Aspar y Nico Terol como valencianos en lo más alto en el Mundial de Motociclismo. El de Algemesí, de 24 años, aseguraba estar todavía en una nube, "todavía me está costando asimilarlo, todavía sigo en shock, de hecho cuando me proclamé campeón me puse a llorar mucho". "Ya estoy en los libros, es lo que quería conseguir, ahora ya puedo decir que soy campeón del Mundo".
El flamante campeón nos ha atendido en exclusiva en Onda Deportiva Valencia donde nos ha explicado desde sus sentimientos tras conseguirlo hasta su polémica con el japonés Sasaki con el que pugnaba por el entorchado mundial
Llegar a Valencia como campeón
Jaume celebra ya con los suyos aunque ya pensando en que la semana que viene podrá lucir su Mundial en el Gran Premio de la Comunidad Valenciana en el Ricardo Tormo de Cheste, “va a ser un sueño correr en casa como campeón del mundo”, donde llegará como campeón y disfrutará de su última carrera en Moto3, pues el año que viene correrá en Moto2, apostillando que “no había otra que intentar cerrarlo en Catar, porque aquí habría sido bonito para la afición, pero quería ser campeón del mundo en Catar y disfrutar en casa como campeón del mundo. Son palabras mayores, no todo el mundo lo puede hacer”.
Polémica con Sasaki
Al respecto de la polémica con el japonés Ayumu Sasaki, con quien pugnaba por el título, explicó que tenía “un cúmulo de sensaciones muy fuertes, muchos nervios” y que le costó descansar antes del gran premio. “Creo que soy justo campeón. He ganado cuatro carreras, he tenido seis poles, diez pódiums… y en carrera pasó lo que pasó”, incidió Masià, después de que el japonés dijera al terminar la carrera que no podía felicitar al valenciano y que era “una vergüenza”.
El de Algemesí matizó sus palabras en las posteriores declaraciones tras la carrea indicando que "estaba muy caliente cuando acabé la carrera, al final lo que la gente tiene que entender es que es un cúmulo de sensaciones, muchos nervios, por la mañana lo pasé mal, por la noche me costó descansar. Al final él no ha ganado ninguna carrera pero tiene que estar echando más de menos los cinco puntos que perdió en Malasia con su compañero, así que, así son las carreras y he tenido suerte
