Joaquín Barceló, amigo de la infancia del 'expresident' de la Generalitat Valenciana y exministro del PP, Eduardo Zaplana, ha confesado que era el testaferro del 'expresident': "Me pidió que me encargase de su dinero porque él estaba en política y lo hice. Me lo pidió como favor y al principio lo vi lícito", ha relatado, para después agregar que se ha sentido "utilizado".
Estas han sido sus palabras este miércoles en la tercera jornada del juicio que se sigue en la Audiencia de Valencia por el caso Erial en el que se investiga el supuesto cobro de más de 10 millones de euros en comisiones derivadas de concesiones de ITV y parques eólicos de la Comunitat Valenciana.
Barceló, apodado 'Pachano', ha reconocido que aparecía en distintas sociedades y preguntado por si el dinero de estas sociedades era de Zaplana, ha respondido: "Me dijeron que era de Zaplana y de la familia, que no tributaba pero que era todo normal".
Ha confirmado que fue a Luxemburgo para hacerse cargo de una sociedad a petición de Zaplana que pertenecía a los hermanos Cotino --el fiscal estima que en esta cuenta había dinero de las 'mordidas' por los contratos públicos--. "Me dijo que se había encontrado con un dinero que no esperaba y que si me podía hacer cargo de la cantidad porque él estaba en política y tenía miedo al tema mediático. Me dijo que era una operación transparente y lícita y acepté por amistad", ha detallado.
"Yo solo firmaba lo que me daban y punto. No daba órdenes ni disponía del dinero del señor Zaplana", ha repetido a lo largo del interrogatorio, tras concluir que se ha sentido "utilizado", aunque "no defraudado" por el exministro del PP. "Siempre lo he hecho pensando que las cosas eran lícitas. Era mi amigo, me lo pedía y se lo hacía. Era muy atrevido, pero sí", ha concluido a preguntas del fiscal. No ha querido responder a ninguna parte más y su abogado no le ha formulado ninguna cuestión.
Zaplana ve "evidente" que alguien miente
A la salida del juzgado, y preguntado por los medios respecto a la confesión de Barceló, Zaplana ha señalado que ve "evidente" que alguien está mintiendo y ha admitido que se esperaba este testimonio. "No creo que haya sorprendido a nadie, estas conformidades que nadie reconoce las sabemos desde hace mucho tiempo", ha precisado.
"Esto no es cuestión de sentimientos, sino de decir la verdad", ha respondido el 'expresident' a la salida del juicio a la pregunta de si se ha sentido defraudado por el que ha sido su amigo desde la infancia.
Además, ha asegurado que no cree que sea necesario cambiar de estrategia de defensa, tras la declaración de Barceló.
En total, en este caso Erial, hay 15 acusados, entre ellos Zaplana, y el fraude está cuantificado en más de 20 millones de euros.