Les Corts Valencianes debaten las primeras cinco grandes proposiciones de ley de la Generalitat de PP y VOX. Con ellas, el Consell de Carlos Mazón aspira a aplicar reformas destacadas en ámbitos como la memoria democrática, el sector educativo o los medios de comunicación públicos valencianos, entre otros. Una serie de modificaciones normativas que tendrán, también, su eco en clave de transparencia con una nueva ley antifraude.
La Comisión de Economía y Hacienda del Parlamento valenciano ha acogido la intervención del actual director de la Agencia Valenciana Antifraude, Joan Llinares, una institución en el punto de mira de la reforma de PP y VOX. Llinares recuerda que la corrupción es una cuestión que debe atañer al conjunto de la sociedad como práctica "que se infiltra por todas partes" y censura, en este sentido, que la reforma de las cinco leyes sea tramitada por vía de urgencia.
"Yo siempre he sido partidario de que las leyes, cuanto más sosegadamente se debatan, siempre es positivo y siempre es mejor para la propia actividad normativa", reivindica el director de la Agencia Valenciana Antifraude.
En caso de eliminar esta institución, Joan Llinares explica que la Agencia Antifraude de España podría abrir una delegación en la Comunitat Valenciana y, en caso de mantener la valenciana, su actual director advierte de las posibles consecuencias jurídicas y legales de situar, al frente, a un profesional de cuestionable competencia.
"Si no se cumplen los requisitos, es impugnable. Si una persona es nombrada sin cumplir los requisitos, se va a los tribunales y se anula ese nombramiento si no se atiende en primera instancia", advierte el todavía director de la Agencia Valenciana Antifraude. "Evidentemente, yo defenderé siempre la importancia de la mayoría cualificada para personas que ostentan unas funciones y unas responsabilidades de órgano de control", afirma Joan Llinares.