Este planteamiento hace pensar que la Ley de Memoria Democrática y para la Convivencia de la Comunitat Valenciana está en el punto de mira y que por tanto no pueda darse continuidad a las exhumaciones que siguen pendientes.
Desde el grupo de recuperación de memoria histórica no son optimistas e insisten que derogar la ley supondría que decaiga todo lo que dependa de ella. Como consecuencia recuerdan que en el plano humano supondrá que numerosas personas de 80 / 90 años no puedan cerrar su herida.
Según su presidente Matías Alonso hay mucha inquietud entre las familias que están pendientes de que su proyecto siga adelante después de estar toda la vida buscando a sus familiares.
Respeto a las familias
En la actualidad se están llevando a cabo varios proyectos algunos de ellos dependientes de la Diputación de Valencia, cuyo coste ya está concedido, y otros, como el caso de los proyectos de recuperación en Paterna o Lliria, con apoyo económico compartido por el ejecutivo autonómico valenciano, la federación de municipios u otras entidades.
Insiste Alonso que en algunos casos se buscan los restos tanto de franquistas y republicanos por lo que afirma que la reconciliación es pasar página pero respetando a las familias.
Insiste en que los únicos que hablan con odio son los que se oponen a que las exhumaciones se realicen. Pide a los ciudadanos que voten con inteligencia en las próximas elecciones generales puesto que considera que la única esperanza para las familias son las ayudas que pueda mantener el gobierno central.