Rus ha declarado en la vista de las piezas B y F del caso Imelsa, por las que la Fiscalía solicita para él 12 años de prisión por los delitos pertenencia a organización criminal, delito continuado de malversación de caudales públicos, falsedad en documento oficial cometido por funcionario público y prevaricación administrativa. De los 25 acusados, 11 de ellos han reconocido los hechos que se les atribuían a cambio de ver reducidas sus condenas hasta los 14 meses de prisión. Rus ha declarado durante veinte minutos y solo ha contestado a las preguntas formuladas de sus abogados.
De hecho, ha puesto como ejemplo que el entonces gerente de Imelsa Marcos Benavent, autodenominado 'yonki del dinero', fue nombrado por el consejo a propuesta del PP: "El ministerio fiscal que diga lo que quiera. No fue una decisión unilateral", ha subrayado. Sobre Benavent, ha explicado que considera que era una persona "apta" para el cargo y ha resaltado que no hubo "ningún conflicto" en sus ocho años de trabajo en una empresa con unos 700 u 800 trabajadores. Rus ha relatado que, en diciembre de 2014, Benavent le abordó en una comida y le pidió que le despidiera porque para cobrar por los ocho años trabajados, "le dije que no podía aceptar", ha comentado. Después, "el día 26 de ese mes se fue a Ecuador" y denunciaron en Fiscalía "algún desfalco".
Rus ha insistido en que sus atribuciones en Imelsa estaban cedidas a un diputado, el de Empresas. Preguntado por si contrató a 'zombies' en Imelsa, ha contestado que "jamás". "Todos los que he contratado han sido para el gabinete de la Diputación, no para Imelsa, ha añadido.