La Conselleria de Territorio, tras la presentación de la documentación del Nuevo Mestalla por parte del Valencia, solicitó dos informes antes de tomar una decisión en torno a la ATE. El primero al Ayuntamiento de Valencia para saber si se cumplen las condiciones pactadas en el convenio y el segundo al IVF para saber si existen las garantías financieras y los avales necesarios para construirlo. Hoy hemos conocido el primero de ellos, el del Ayuntamiento, tras la rueda de prensa de su vicealcaldesa Sandra Gómez.
Cumplir el convenio o caducar la ATE
Sandra Gómez ha insistido en que "si el Valencia CF no cumple, no tendrá los beneficios urbanísticos. Plantea un estadio de 45.753 espectadores. No resultaría admisible que el estadio que finalmente se construya no alcance esas exigencias mínimas y mucho menos que fuera más pequeño que el actual Mestalla". Y recordó que el club ha pedido licencia para ese aforo sin compromiso de ampliación y solo con la posibilidad de hacerla.
Además añadía respecto al aforo que se firmó de 70.000 espectadores que "para nosotros, que el estadio no tenga ese aforo no es cumplir con la ATE. Había un objetivo muy claro: que tuviera más aforo que el actual y que se pudiera acoger eventos nacionales e internacionales. Es un compromiso innegociable que se cumplan las características que se acordaron entre club e instituciones valencianas. Si el cumplimiento de las obligaciones de la ATE dan como resultado un estadio más pequeño que el de Mestalla, no tendrá ningún sentido. Si defendemos una posición legal, si queremos mantener derechos urbanísticos debe ser para financiar ese estadio. Pedimos que se suspenda la concesión de cualquier licencia de los terciarios del Nuevo Mestalla hasta que el Valencia cumpla sus compromiso".
Y sobre las pistas de atletismo "es negociable y podrían ser pistas no permanentes". Y recordó el compromiso de "incluir un museo del club, la sede social y espacios comerciales".