tres años de bloqueo

El Tribunal de las Aguas sigue sin poder abrir su museo por un desacuerdo con el Ayuntamiento

El gobierno local sigue sin formalizar la cesión del edificio municipal que alberga el centro de interpretación

Nacho Reig

València |

La Casa Vestuario, sede del museo
La Casa Vestuario, sede del museo | Onda Cero/Nacho Reig

La falta de acuerdo entre el Ayuntamiento de València y el Tribunal de las Aguas mantiene bloqueada desde hace ya más de tres años la apertura del museo y centro de interpretación sobre esta milenaria institución que media en los conflictos entre los regantes de la huerta. A mediados de 2021 el museo quedó montado y listo para abrir en el edificio municipal de la Casa Vestuario de la plaza de la Virgen. Pero las discrepancias entre los responsables del Tribunal y el gobierno local impiden que pueda inagurarse.

El problema está en la pretensión de los responsables del Tribunal de que sea el Ayuntamiento el que asuma los costes de mantenimiento del museo, algo a lo que se niega el ejecutivo municipal. El pasado mes de enero la Junta de Gobierno Local del consistorio estuvo a punto de aprobar el convenio de cesión de la Casa Vestuario al Tribunal de las Aguas. Pero finalmente el asunto quedó sobre la mesa porque, según explicaron entonces desde el ejecutivo municipal, todavía se estaba cerrando el texto del acuerdo.

El Ayuntamiento tuvo que trasladar hace varios años a otro edificio la biblioteca municipal que ocupaba la primera planta de la Casa Vestuario con el fin de dejar el espacio libre pare el museo y tanto el consistorio como la Generalitat subvencionaron el montaje de la instalación. El recinto cuenta con una exposición permanente de fotografías sobre la historia y funcionamiento del Tribunal de las Aguas, así como de mobiliario, vestuario y otros utensilios que usan sus miembros. También hay un área de archivo e investigación y otra con proyecciones audiovisuales de las sesiones del Tribunal.

En 2018 el Ayuntamiento, la Generalitat y el Tribunal de las Aguas firmaron un protocolo de intenciones para crear este centro de interpretación destinado a dar a conocer una institución que, a pesar de que en 20029 fue declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, todavía no contaba con un lugar adecuado para su difusión. Un objetivo que sigue sin poder cumplirse a la espera de que los responsables del Ayuntamiento y del Tribunal se pongan de acuerdo.