El Ayuntamiento de València puso en marcha hace ahora casi un año -a finales de septiembre del año pasado- el primer servicio municipal de España destinado a prevenir y atender casos de violencia de género entre la población adolescente. Se trata de un programa de intervención psicosocial que intenta corregir comportamientos agresivos hacia las chicas, en adolescentes de entre 14 y 17 años.
Esta iniciativa pretende dar una respuesta ante el aumento de casos de violencia machista en edades cada vez más tempranas. Una respuesta, además, adaptada a las especiales formas de relacionarse de los adolescentes. El servicio incluye también acciones de ayuda psicológica para las chicas víctimas de agresiones machistas, así como para los padres y tutores tanto de agresores como de víctimas.
La concejala de igualdad, Lucía Beamud, ha hecho este jueves balance de este primer año de funcionamiento. La iniciativa fue bautizada como “Taronja Sencera” porque, según Beamud, se centra en romper los estereotipos en torno al concepto de “amor romántico”.
En este primer año, el programa ha asesorado a más de 300 profesionales que trabajan con la población juvenil. También ha orientado de forma individual y grupal a 19 chicas y 14 chicos junto con sus familias para evitar y erradicar comportamientos de control, celos y violencia psicológica en las primeras relaciones de pareja.
La concejala ha recordado que se puede contactar por teléfono o whatsapp (658 452 673), a través de la web de “Taronja sencera” y sus redes sociales, y también presencialmente, en el centro de juventud de la calle Campoamor, 91. El servicio cuenta con dos psicólogas especializadas, una de ellas agente de igualdad, otro psicólogo especializado, una diseñadora y un informático. Entre sus tareas figura la atención psicológica individual y grupal, y la sensibilización y formación específica al profesorado, asociaciones juveniles, técnicos de juventud y profesionales que trabajan con jóvenes para que sepan detectar los primeros indicios y puedan intervenir de forma efectiva.
Hace tres años el Ayuntamiento también puso en marcha unos cursos de reeducación para adultos maltratadores por los que han pasado ya más de 200 hombres.