En cuestión de unos minutos debería volver a respirar con normalidad. De no ser así, trasládalo a un lugar más fresco y, si es necesario, mójalo. Pero, si la respiración sigue sin normalizarse, tómale la temperatura. Si hay hipertermia, es decir, una temperatura más alta de la normal, acude al veterinario. Podría estar sufriendo un golpe de calor.
La influencia del calor en las razas de perros
Los perros pertenecientes a razas de pelaje espeso tendrán más dificultades para regular su temperatura cuando hace calor. Es decir, van a tolerar menos los termómetros altos. Un ejemplo son los perros nórdicos como los Husky siberiano o los Alaskan malamute.
Salir si hace demasiado calor
Por mucho calor que haga, los perros tienen que seguir saliendo a la calle. No solo para evacuar, sino porque necesitan ejercitarse y todos los estímulos que les ofrece el paseo, como el contacto con sus congéneres, con personas, los diferentes ruidos, los olores, etc.
El calor en las patas
El asfalto o la arena pueden alcanzar temperaturas muy elevadas cuando se exponen a la radiación solar directa. A nosotros nos protege nuestro calzado, pero los perros pisarán directamente sobre sus almohadillas. Pon tu mano sobre el suelo e intenta aguantar