Para combatir el bochorno, nada mejor que permitir que los perros se sumerjan en el agua durante sus paseos por el parque o el campo. Sin embargo, esta inocente diversión puede resultar perjudicial para la salud de los canes y queremos instar a los dueños a tomar precauciones para mantener a salvo a los perros cuando se acerquen a masas de agua dulce retenidas, como lagos, charcas o estanques. El adiestrador y psicólogo canino Ángel Osuna nos habla de ello en 'Más de uno Vega Baja'.