El Orihuela dio la sorpresa fuera de casa ante el Langreo al vencer en la prórroga por 1-2 en Copa del Rey y pasar a la siguiente eliminatoria en la que se volverá a enfrentar a un equipo de Primera División en Los Arcos. Para conseguir la clasificación en un campo donde perdieron un ascenso en 2018, los oriolanos tuvieron que ponerse el traje de equipo de gran nivel para sortear todos los inconvenientes que fueron surgiendo durante el encuentro. Y es que los locales se adelantaron en el minuto 73 con un gol de Vanderson de penalti muy discutido. Se le anuló un gol al Orihuela, pero el empate llegó en el minuto 86 por medio de Chili. Así se llegó a la prórroga, pero en ella fue expulsado precisamente el autor del gol oriolano. Con inferioridad numérica, el equipo de José Ramón Rodríguez fue capaz de con seguir otro gol que daba la vuelta al marcador y clasificaba a los de la Vega Baja para la siguiente ronda en la que se medirán a un Primera División en Los Arcos. El gol de la victoria lo hizo Gonzalo Miranda en el minuto 110.
De esta forma, además, el Orihuela se venga del resultado de 2018 frente a este mismo rival, que le dejó sin ascenso. Uno de los jugadores de la plantilla "escorpión" de esa época que se mantiene en el equipo es el portero Aitor Arias. Tras la victoria de este miércoles por 1-2 se mostró muy contento, sobre todo por la afición.