La muestra, realizada por la Universidad de Alicante, se divide en tres bloques principales: El contexto histórico, cuyo contenido ha sido desarrollado por la profesora María del Carmen Irles; Cervantes, hijo de sus obras, a cargo del profesor José María Ferri; y Global Shakespeare, trabajo llevado a cabo por el profesor y comisario de la exposición José Manuel González.
Los paneles expositivos dedicados al primer apartado, incluyen ilustraciones de la época junto a textos informativos que explican al visitante cómo era la sociedad del Siglo de Oro, la influencia del avance otomano hacia Occidente o cómo eran las relaciones angloespañolas en esos años, con el objetivo de contextualizar cultural e históricamente la realidad en la que se insertan las vidas de Shakespeare y Cervantes. En este sentido, el recorrido expositivo continúa profundizando en las consecuencias derivadas de la expulsión de los Moriscos de la Península.
La segunda parte de la muestra, “Cervantes, hijo de sus obras”, presenta los devenires de Cervantes por el mundo, su cautiverio en Argel y su vuelta a España, y continúa con un panel explicativo sobre la búsqueda y hallazgo de los sus restos. Este apartado aborda, como no podía ser de otra forma, lo que ha denominado sus “raras invenciones”, en las que se incluyen sus creaciones literarias acompañadas de unas interesantes ilustraciones, como las portadas de la primera parte de La Galatea (Madrid, 1585), de El Ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha (Madrid, 1605), o un óleo de Marcel Duchamp titulado “Dulcinea” de 1911, entre otras curiosas ilustraciones.
El éxito de ventas que supuso El Quijote así como su enorme difusión en Europa y América hicieron que sus personajes saltaran rápidamente de la novela a la vida llegando a ser más conocidos que su propio creador. Así comparecieron en fiestas, desfiles, pasacalles y todo tipo de acontecimientos sociales, lúdicos y literarios. Desde entonces hasta nuestros días, la imaginación de una legión de artistas ha conformado la figura de Don Quijote convirtiéndolo en protagonista de sus creaciones. Esta visión de El Quijote imaginado por diversos artistas ocupa otro apartado destacado de esta segunda sección, con ilustraciones de pintores de la talla de Paul Cézanne o Francisco de Goya, el holandés Domenicus van Wynen, el inglés John Hamilton, o incluso la portada que la revista norteamericana The New Yorker dedicó a El Quijote en 1988.
La sección de esta muestra dedicada a Cervantes, finaliza con una reflexión sobre las frustraciones de Miguel de Cervantes, en su vertiente teatral frente a los éxitos de Lope de Vega y ante la publicación de Avellaneda de su espurio Quijote.
Finaliza la exposición con “Global Shakespeare”, un bloque en el que se contextualiza el tiempo de cambio e innovación en el que vivió Shakespeare y que influyó definitivamente en su obra, marcada por las nuevas ideas que el Renacimiento trajo consigo. Shakespeare también se vio influenciado por Londres y la proliferación de nuevos teatros, en una época en la que la ciudad se convirtió en el centro literario por excelencia. Destaca también en este apartado, una sección en la que se aborda la singular importancia de la lengua dentro de la obra de Shakespeare, tanto en sus creaciones teatrales como en su poesía.
La exposición finaliza con un panel explicativo sobre la relación real y literaria entre los dos genios de la literatura universal, en el que se pone de relieve que la única relación literaria contrastada entre ambos sería “Cardenio”, la obra perdida de Shakespeare escrita en colaboración con John Fletchser, una obra inspirada en la primera parte de El Quijote.
Esta interesante y educativa exposición se puede ya visitar en el claustro de la Biblioteca Pública María Moliner de Orihuela.