Nahúm nos recuerda que estamos en una zona sísmicamente activa, y que terremotos similares al de 1829 también hay noticias que se habían producido a lo largo de la historia, eso sí con un intervalo de tiempo de muchos años.
Por otra parte Méndez también nos recuerda que en la actualidad las normas de construcción en la zona obligan a ser sísmicamente resistentes, pero si en el boom urbanístico de los 90's no se aplicaron correctamente, lo sabremos cuando tengamos algún terremoto de magnitudes superiores a 4.