En los días posteriores a este suceso, el concejal de Patrimonio Histórico mantuvo diferentes reuniones con la arquitecta, Rosario Berjón, y con el inspector de Patrimonio Mueble, Luis Pablo Martínez, (ambos técnicos del servicio territorial de Patrimonio de la Conselleria de Cultura), con los técnicos municipales, y técnicos de la Diócesis de Orihuela-Alicante, para observar y evaluar las medidas de emergencia dispuestas, tras el desplome de parte de la bóveda, mientras que también realizaron un recorrido por la iglesia para analizar su estado.
Por otra parte, tal y como ha avanzado Almagro, “la primera actuación prevista de estas obras de restauración y rehabilitación estará centrada en la sustitución de la cubierta de la Sacristía”.
El edil de Patrimonio Histórico también ha hecho mención a que la iglesia de Santa Justa y Rufina fue objeto de una importante intervención con motivo de la celebración de la “Luz de las Imágenes” en el año 2003, cuando se realizaron importantes mejoras para la consolidación del subsuelo de la iglesia.