El último temporal de lluvias ha dejado más de 30 litros por metro cuadrado en toda la zona del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares en los últimos dos días, una lluvia que permite la renovación de las aguas en las zonas por las que menos circula, según ha informado el Consorcio en un comunicado.
El primer cierre de la ruta Botánica tuvo lugar en septiembre de 2021 en Vila-real, hace tres años. Se produjo un gran desprendimiento en el margen derecho de la primera parte del recorrido que obligó a cerrarla por razones de seguridad durante 8 meses. La lluvia provocó que una gran cantidad de rocas y tierra cayeran sobre la senda, dejándola completamente intransitable.
Los sucesos meteorológicos sobre las paredes de los acantilados que canalizan el río Mijares provoca una continua erosión y una progresiva alteración del cemento que proporciona la consistencia de los materiales, formando grutas y aleros cada vez más pronunciados.